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El sur también existe

El jueves 14 de octubre, el gobierno porteño inauguró el Edificio del Centro Metropolitano de Diseño, en la calle Algarrobo 1041, del barrio de Barracas. Allí funcionó el antiguo Mercado de pescado, desde 1934 hasta 1983.

Con un excelente desfile de moda quedó inaugurado este nuevo polo de diseño, en una manzana de la ciudad que ayer estaba vestida de fiesta para recibir a funcionarios, empresarios, creativos y público en general, que tienen grandes expectativas, en este espacio que además será utilizado como Centro Cultural en el que se realizarán exposiciones, talleres y otras actividades. El objetivo es fomentar el desarrollo creativo y potenciar la zona.

En la inauguración estuvieron presentes el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri y el ministro de Desarrollo Económico, Francisco Cabrera. Allí Macri expresó su satisfacción ante este logro, que según sus propias palabras, "después de años de desidia y abandono, logramos recuperar este lugar y finalmente ponerlo en actividad, para que más de 30.000 estudiantes de diseño lo utilicen para hacer realidad sus ideas. Servirá para ensamblar lo público y lo privado y mostrar al mundo todo el talento que hay en esta ciudad".

La nueva obra, proyectada por el arquitecto Gastón Flores, ocupa 14.000 m2. Para el centro de diseño se ha conservado la estructura metálica del mercado, incluso una calle central que permitía el acceso vehicular y que vincula las entradas principales. En un espacio amplio y moderno, este edificio albergará las oficinas gubernamentales que promocionan el diseño y las industrias creativas; la incubación de empresas y laboratorios, en los que se alojará el centro de investigación, desarrollo e innovación en ingeniería y diseño industrial; espacios para aulas y talleres; una biblioteca especializada; un museo y centro de interpretación; un bar-cafetería y una futura tienda de diseño.

A principios del siglo XX, Barracas era un barrio popular de gente trabajadora, próspero, con fábricas, mercados. Después de la mitad del siglo, comenzó a perder su prosperidad, sus fábricas se cerraron, se inhabilitó su estación de trenes, y la construcción de la Autopista hizo desaparecer muchos edificios y dos plazas.

Actualmente, el gobierno tiene en cuenta que "el sur también existe" y de a poco, vamos viendo como Barracas está resurgiendo de sus cenizas y recuperando su esplendor.

Susana Espósito para www.info-almagro.com.ar (15/10/10)
(Extensión 2394 caracteres) - Fuente: CMD