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Al Maestro, con cariño

Hoy cumpliría 105 años el gran músico y vecino de Almagro, Osvaldo Pugliese. Fue uno de los personajes más queridos en el ambiente tanguero y alguien coherente, entre lo que decía y lo que hacía.

Nació en el vecino barrio de Villa Crespo, el 2 de diciembre de 1905. Según él mismo decía "ingresé al mundo de la música rascando un violín". Después estudió piano y a los catorce años estaba debutando profesionalmente en la calle Corrientes.

Cuando tenía veinte años tocó junto a figuras como Roberto Firpo, Pedro Mafia y Elvino Vardaro, para luego ingresar en la orquesta de Pedro Láurenz. Finalmente, en el año 1939, formó su propia orquesta que mantuvo hasta su fallecimiento.

Grabó más de 600 temas, siendo más de 150 de su autoría, como ese considerado un himno por los tangueros: "La Yumba", pero no fue el único, también creó obras como "Recuerdos", "Malandraca", "Negracha", entre otros.

Fue el impulsor del Sindicato Argentino de Músicos, en 1935, también uno de los primeros afiliados al Partido Comunista, tenía el carnet 108, que lucía con orgullo. El Maestro fue un comunista de verdad, coherente entre lo que decía y hacía. Al término de cada presentación repartía el cachet por partes iguales entre todos los músicos, sin hacer distinción.

Durante la época de la dictadura, por estar prohibido, su orquesta se presentaba y el piano aparecía cerrado y con un clavel rojo sobre su tapa.

Omar Pedro Granelli, en su libro Almagro en el intento, relata: Sobre su calidad de pianista, nos dijo Horacio Ferrer: "Creó un estilo y lo cultivó con rango de maestría equivalente de la que Elvino Vardaro alcanzó con su violín, Aníbal Troilo con su bandoneón y Carlos Gardel en su canto. Unió en dicho estilo a la pureza y a la variedad del pensamiento pianístico, la magnífica pulsación y las calidades de un sonido apagado, romántico, capaz de dar toda una gama de matices emocionales que emana del sonido de cada nota y se resuelve con exquisita fluidez en la totalidad de la frase ejecutada".

Llevó el tango al Teatro Colón, allí realizó una histórica presentación el 26 de diciembre de 1985, ante una sala colmada y un público que no paraba de pedirle bises.

Fue fundador de La Casa del Tango, institución con sede en el barrio de Almagro, de la cual fue presidente desde 1970 hasta su fallecimiento, en 1995. Precisamente allí, en el escenario de Guardia Vieja 4049, fue donde dirigió por última vez su orquesta el 17 de junio, cinco semanas antes de su muerte.

En la Ciudad de Buenos Aires fue declarado Ciudadano Ilustre.

Fue un músico reconocido también en el exterior y recibió distinciones del gobierno de Cuba, que le otorgó la medalla Alejo Carpentier; por su parte el gobierno francés lo designó Commandeur de L'Ordre des Arts et Lettres´.

Los últimos años los vivió en nuestro barrio de Almagro, donde falleció el 25 de julio de 1995. Sus restos descansan en el Cementerio de la Chacarita y sobre su sepulcro hay una importante escultura que lo muestra sentado a su piano.

Tuve oportunidad de cruzarme varias veces con él y su esposa, juntos solían caminar por las calles de Almagro y saludar cordialmente a los vecinos. Para finalizar, me quedo con una frase de Omar Pedro Granelli: "Nos dejó además la sencillez transitada en sus largas caminatas por nuestras calles y su perdurable interés por mantener nuestra canción porteña en lo más alto de la consideración popular".

Desde este medio, nuestro humilde y merecido homenaje "Al Maestro, con cariño".

www.info-almagro.com.ar (02/12/10) - (Extensión 3483 caracteres)