Reclamo estudiantil y caos de tránsito
Estudiantes del profesorado Joaquín V. González, que funciona en los pisos superiores del Colegio Mariano Moreno, el jueves 1 de junio organizaron un corte de la avenida Rivadavia en su intersección con la calle Virrey Liniers, para protestar por las malas condiciones del edificio. También denuncian irregularidades en el manejo de dinero y falta de personal de maestranza.
Un dirigente estudiantil que representa a la agrupación a cargo del Centro de estudiantes justificó el corte de calle diciendo: "Hay doce ordenanzas para siete mil chicos, cuando años atrás eran unos veinte ordenanzas para tres mil alumnos. Hay un hacinamiento notorio y esto se produce desde hace años. Queremos que vengan a discutir los funcionarios, que nos escuchen a los alumnos y los profesores. Desde hace una semana no tenemos calefacción".
Entre otras cosas, los estudiantes denunciaron que se cayó un ventilador en el aula 29, cosa que fue desmentida por un empleado que supervisa diariamente el funcionamiento del edificio.
Beatriz López, encargada del área de Infraestructura del Ministerio de Educación de la Ciudad, al ser consultada por los colegas de Noticias Urbanas sobre las causas que motivaron la protesta, señaló: "El actual edificio está en muy buenas condiciones pero por actos de vandalismo de los alumnos se encuentra con algunas deficiencias. Por ejemplo, repusimos este año diez inodoros que fueron destruidos y en el segundo piso rompieron diez radiadores, por ello vamos a gastar cuatro mil pesos".
Con respecto a la aparición de ratas que denunció el personal de maestranza, la funcionaria sostuvo que es un problema de los trabajadores que se ocupan de la limpieza y "de las autoridades del colegio". Y aseguró que no tiene ningún pedido de desrastización.
"En el mes de marzo -agregó López- finalizamos una serie de obras eléctricas, pluviales y en aulas pero frente a la permanente respuesta la contrapartida es tomar las calles".
El tema es que con o sin razón estos muchachos generaron un caos de tránsito impresionante, que perjudicó a muchísimas personas que no tienen absolutamente nada que ver con el funcionamiento del colegio y simplemente debían pasar por el lugar en un medio de transporte, para ir o volver de sus trabajos o para realizar algún trámite. Creo que hay que medir las consecuencias y protestar ante quien corresponda, respetando los derechos de los demás.
www.info-almagro.com.ar (02/06/06)