La cultura en los barrios

Artistas y representantes de agrupaciones barriales, que trabajan por la cultura, expresan un enérgico repudio al cierre de locales y argumentan que las exigencias que les piden las autoridades no están acordes a las actividades que allí se realizan.

En los últimos días hemos recibido varias notas donde clubes, teatros independientes, centros de jubilados, bares culturales, peñas, etc., dicen que con el argumento de no cumplir con la reglamentación vigente no les permiten la organización de espectáculos.

Por ejemplo, en una nota firmada por Cipe Lincovsky, Junta de Estudios Históricos de Boedo, Biblioteca Lubrano Zas, Asamblea de Boedo y Unión de Orquestas Típicas, entre otros, nos expresan: "Equiparar la sala de un club barrial o teatro independiente con un mega recital en un estadio deportivo imponiéndoles los mismos requisitos y permisos especiales es una decisión errónea que daría como resultado la reducción de las manifestaciones artísticas y populares y la concentración de la expresión cultural en pocas manos".

"Solicitamos la suspensión inmediata de las clausuras por coercitivas, antidemocráticas y destinadas a socavar el desarrollo de las expresiones culturales barriales hasta tanto no se revise y modifique la legislación vigente. Solicitamos que no se nos quite la alegría de reunirnos y trabajar junto a los artistas del barrio ejerciendo de esta manera nuestro derecho a la Cultura".

"La inexistencia de una normativa específica para la actividad desarrollada en estos espacios restringe y condiciona la expresión artística y la participación ciudadana que en ellos se genera. Este vacío legal no se resuelve con el cierre indiscriminado de los espacios culturales".

Finalizan con un pedido: "Exigimos el derecho a participar del diseño de las políticas sociales y culturales locales y nos oponemos al criterio de que nuestra seguridad es mayor si nos quedamos solos y en nuestra casa".

Sin duda los espacios culturales y sociales cumplen con la función de articular la participación de los vecinos con la producción de nuestros artistas locales en un contexto de valores solidarios y de trabajo en conjunto.

Consideramos que hay que buscar el equilibrio justo, porque parece que antes de Cromagnon estaba todo bien y después todo mal. No pasemos de un extremo al otro, pero creemos que sería interesante considerar cada caso en particular y si un lugar es realmente seguro le permitan funcionar, sin exigencias imposibles de cumplir.

www.info-almagro.com.ar (05/10/06)