Una noche distinta en la Feria del Libro
El Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y la Fundación El Libro, invitaron a vivir una fiesta donde Buenos Aires, con toda su impronta cultural, participó en la tradicional Feria del Libro sumándole espectáculos, intervenciones, lectura, escritores y música.El sábado 28 de abril, a partir de las 21 horas, con entrada a la feria libre y gratuita. Durante cinco horas, diferentes espectáculos sorprendieron a los visitantes para acercar de una manera distinta a los escritores y sus textos, a los libros y su contenido.
Una noche distinta en que la ciudad y toda su magia cultural rompieron las reglas de la tradicional y prestigiosa Feria del Libro.
En La Rural la muestra se extendió hasta las dos de la madrugada con espectáculos y atracciones, fue una mezcla de ficción y realidad, con mucho de circo y actividades poco frecuentes. Porque mientras un carromato con siete actrices recorría la muestra con recitados poéticos, una fila larguísima de personas esperaba en el stand de Ediciones B a que el escritor Brian Weiss les firmara ejemplares de su obra.
Pero Weiss no fue el único que firmaba autógrafos, el jefe de gobierno porteño, Jorge Telerman, hizo lo propio y se fotografió con cuanto visitante se le acercara. Telerman ingresó tras la murga Los Elefantes del bazar, que con coloridos trajes, estandartes y elementos de percusión abrían paso al gobernante, que se hizo presente con su grupo de colaboradores. El jefe de gobierno dijo a la prensa "la idea de promover actividades nocturnas en la Feria tiene que ver con hacer crecer lo libresco con acciones no tradicionales".
En Oráculos se trajo al presente los tiempos pasados de la mano de la Compañía de Improvisación Mosquito Sancinetto, interpretando a los grandes autores: Shakespeare, La Divina Comedia o el Quijote.
Música de jazz en los pasillos y el juego de la búsqueda del tesoro animaban a los visitantes nocturnos.
Para disfrutar de un viaje literario no faltó un antiguo colectivo. "El Espacio Bondi" un colectivo que se transformó así en un altar pagano donde pasajeros y fantasmas de viejos poetas se entremezclaron en un tránsito hacia un lugar insondable.
La Orquesta Típica Fernández Fierro tocó en vivo y el cierre estuvo a cargo del grupo La Chilinga.
www.info-almagro.com.ar (29/04/07)