La solución que no pudo ser

El gobierno porteño había implementado utilizar un carril de la Avenida Rivadavia para que los medios de transporte circularan en dirección contraria, a efectos de solucionar el problema ocasionado por el corte de la calle Bartolomé Mitre desde la tragedia de Cromagnon.

Durante la mañana del 11 de abril, antes de abrir totalmente el contracarril, que se iba a implementar en la Avenida Rivadavia entre Jean Jaurés y Ecuador, se realizaron pruebas para analizar su funcionamiento mediante la circulación de una sola línea de transporte.

El análisis realizado, arrojó una serie de deficiencias, tanto de circulación como de seguridad vial y pese a que se comprobó la factibilidad de implementar la medida, se determinó la necesidad de realizar una serie de trabajos complementarios.

Por ese motivo, el Ministerio de Desarrollo Urbano de la Ciudad (MDU) resolvió dejar sin efecto ese ordenamiento circulatorio.

Por un lado nos parece muy bien que no hagan obras que, después más que favorecer complican las cosas, lo ideal es buscar soluciones definitivas y nuestra humilde opinión, como la de la mayoría de los vecinos de esa zona, es que habiliten el tránsito de Bartolomé Mitre, como debe ser.

Respetamos el dolor de los familiares y queremos que se haga justicia, que se aplique el merecido castigo a los culpables, pero creemos que nada ganarán manteniendo cortada una calle tan importante como lo es Mitre en esa zona, con el perjuicio que esto ocasiona a los miles de pasajeros que la transitan diariamente y las molestias que sufren los vecinos del lugar.

www.info-almagro.com.ar (17/04/08)