Somos todos iguales?

Hace unos días se pudo ver por televisión a Marcelo Tinelli viajando en el automóvil de Andy Kusnetzoff, conductor del programa Argentinos por su nombre, que se emite por Canal 13, durante el trayecto, este último le haría una nota para hablar de las consecuencias del éxito en su vida.

Allí, Tinelli reconoció que su fama le da cierta impunidad y, en efecto, en el programa pudo verse cómo ambos eran detenidos para un control de alcoholemia por la policía que, al ver quiénes eran los pasajeros del auto, les permitió seguir su camino sin efectuar el chequeo.

También, en el matutino La Nación del sábado 24 de mayo de 2008, como parte de una nota, salió publicado el siguiente párrafo:
En los controles también hubo otras "licencias", según informó a LA NACION personal del operativo, que prefirió mantener su identidad en reserva. "A veces, nos enfrentamos a funcionarios públicos que presionan para que no se les realice el control y terminan zafando. No hay mucho que hacer para evitarlo, porque uno puede arriesgar el trabajo si se niega a dejarlos pasar", dijo una de las fuentes.

Del mismo modo, una noche mientras esperaba el colectivo en la avenida Las Heras y Pueyrredón, pude observar que el personal que estaba con el móvil instalado en esa esquina detuvo a un automóvil Mercedes Benz muy lujoso para realizar el control, pero el conductor mostró una credencial o algo por el estilo y le permitieron continuar su marcha sin haberlo sometido al correspondiente control de alcoholemia.

Mi pregunta es ¿a los famosos y poderosos, no les afecta el alcohol? o debo pensar que ellos "están alegres" y los otros "borrachos". ¿No se toma conciencia que un accidente lo puede provocar cualquiera, sin distinción de clases?.

Muchachos, pónganse las pilas y si controlan, controlen en serio, así no sirve.

www.info-almagro.com.ar (14/06/08)