Una multitud visitó la embajada de FranciaEl domingo 20 de septiembre la embajada de Francia abrió sus puertas para que el público pudiera recorrer parte del interior de ese maravilloso palacio, que perteneció a la familia Ortiz Basualdo. Se estima que la visitaron más de 3000 personas.En una hermosa mañana de domingo, que anunciaba la llegada de la primavera, largas colas se formaron ante el palacio, ubicado sobre Cerrito y la coqueta Avenida Alvear, donde funciona la embajada de Francia. Llegamos, nos acreditamos, y fuimos muy cordialmente recibidos por una señorita que nos llevó a recorrer las dependencias de planta baja y primer piso, donde pudimos apreciar los lujosos ambientes, algunos amoblados tal como los dejaron sus antiguos dueños, la familia Ortiz Basualdo. La construcción de este palacio comenzó en 1912, sobre un proyecto del arquitecto francés Paul Pater, y concluyó en 1918, momento en que fue ocupado por la familia Ortiz Basualdo. Este edificio fue utilizado en 1925 como residencia oficial del Príncipe de Gales, quien manifestó su admiración por el confort y el carácter grandioso del mismo. En 1939 fue adquirido por el Gobierno francés y desde entonces funciona allí la embajada de ese país europeo. Vale recordar que en la década del setenta ese edificio estuvo a punto de ser demolido con motivo de las obras de prolongación de la avenida 9 de Julio, sin embargo según expresan en la embajada “Solamente el esfuerzo del conjunto de los ciudadanos de Buenos Aires y del gobierno francés permitieron salvar el edificio de la demolición”. Pudimos conocer la entrada principal, el vestíbulo, la escalera de honor y los salones del primer piso, la biblioteca, la sala de billar, sala de baile, el salón chino, el impresionante comedor con la mesa dispuesta para 24 comensales, el jardín de invierno, en fin, una verdadera maravilla de la arquitectura y el buen gusto, que merece ser desarrollada en otra nota. Después de ver eso, decidimos ir a Mar del Plata para conocer cómo era la casa de veraneo de la familia Ortiz Basualdo, esa residencia constituye uno de los últimos exponentes de la arquitectura pintoresquista del siglo XX en la “Ciudad feliz”, sus dueños la habitaron cada verano desde 1910 hasta 1970. Actualmente funciona allí el Museo Municipal de Arte Juan Carlos Castagnino.
www.info-almagro.com.ar (29/09/09) - (Extensión 2316 caracteres)
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