El "Varón del Tango"

El 26 de noviembre se cumplieron cuarenta y cinco años de la desaparición de Julio Sosa, en un accidente automovilístico en el barrio de Palermo.

Estamos viviendo un momento de esplendor en cuanto al Tango se refiere y lógicamente, Buenos Aires es el epicentro. Por eso queremos recordar a una de las máximas figuras de la música rioplatense a quien se lo conocía como "El varón del tango".

Julio María Sosa Venturini nació el 2 de febrero de 1926 en Canelones, República Oriental del Uruguay. Hijo de Luciano Sosa, peón de campo, y Ana María Venturini, lavandera. En su juventud, a causa de la pobreza, se ocupó de hacer trabajos temporarios y en distintos rubros.

Sus comienzos profesionales fueron como vocalista en la orquesta de Carlos Gilardoni en la ciudad de La Paz, luego vino a probar suerte en Buenos Aires, donde cantó en tres orquestas: Francini-Pontier (1949-1953), con la que realizó 15 grabaciones en RCA Victor; Francisco Rotundo (1953-1955), con el que grabó 12 temas en el sello Pampa; y finalmente con Armando Pontier (1955-1960), en esta etapa Sosa grabó en total 33 registros, 8 de ellos para RCA Victor (1955-1957) y los 23 restantes en el sello CBS Columbia (1957-1960).

El periodista Ricardo Gaspari fue quien lo llamó "El Varón del Tango" y éste apodo dio nombre a su primer long play.

Al cantor le gustaban mucho los automóviles y conducirlos a gran velocidad, esto provocó que tuviera varios accidentes de tránsito y justamente el sufrido el 26 de noviembre de 1964, a las 9,30 de la mañana se llevó su vida en la esquina de Avenida Figueroa Alcorta y Mariscal Ramón Castilla, en el barrio de Palermo.

Los restos de Julio Sosa fueron velados en el estadio Luna Park y actualmente descansan en el cementerio de su ciudad natal.

Una gran pérdida, de quien a los 38 años todavía tenía tanto para dar. Curiosamente, en su último reportaje entre otras cosas dijo "Gardel fue inteligente hasta para morir, lo hizo en su mejor momento y no tuvo que atravesar por un período de decadencia".

No nos olvidamos de sus memorables versiones de "Cambalache", "La Cumparsita", "Nada", "Nunca tuvo novio", "El firulete" y "La gayola" el último tango que interpretara en vivo, en una audición de radio, el día antes de morir. Justamente la última estrofa de ese tango dice “pa que no me falten flores cuando esté dentro el cajón”, tal vez premonitorio.

Desde aquí, nuestro homenaje a un grande de nuestra música ciudadana, a 45 años de su fallecimiento.

www.info-almagro.com.ar (02/12/09) - (Extensión 2475 caracteres)
Fuente consultada: wikipedia y archivos www.conozcabuenosaires.com.ar