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El deterioro del Normal 7

El viernes 30 de marzo un grupo de auditores del Frente para la Victoria (FpV) de la Auditoría de la Ciudad de Buenos Aires, realizó una recorrida junto a los comuneros de la comuna 5, por la Escuela Normal 7 José María Torres, ubicada en la Av. Corrientes 4261 del barrio de Almagro.

El 5 de marzo, junto con la Comunidad Educativa, denunciaron ante el Ministerio de Educación los sucesivos accidentes ocurridos en el establecimiento así como las irregularidades en las obras realizadas entre 2006 y 2011. La denuncia que se instrumentó mediante Nota N° 422812/12 hasta la fecha no ha tenido respuesta. Asimismo no fue recibido el Certificado Final de Obra, dando de todos modos comienzo a las clases en el sector donde se realizaron las obras.

Los auditores y comuneros fueron recibidos por la rectora María Antonia Tellechea junto a representantes de la Asociación Cooperadora y del Centro de Estudiantes, quienes compartieron las preocupaciones diarias que vienen padeciendo hace varios años y luego, tanto los auditores como las autoridades del colegio y los alumnos se comprometieron a colaborar para poder retomar el diálogo con el Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, para que este organismo dé las garantías necesarias para poder transitar el año lectivo y prevenir algunos accidentes acontecidos en los años anteriores.

Según detallan, en junio de 2007 hubo una pérdida de monóxido de carbono que provocó la internación de 20 personas y se constató que actualmente, la conexión aún sigue funcionando mal y no se distribuye por todo el establecimiento, motivo por el cual no pudo inaugurarse el laboratorio, por la inadecuada instalación del gas.

Amplían diciendo que en el año 2011 se cayó una puerta que provocó lesiones a una alumna de 7mo grado, debido a que las bisagras que sostenían la misma, no eran del tamaño que correspondía.

Para finalizar, expresan que en febrero de 2012 el techo del pasillo que se encuentra frente a las aulas del Jardín de Infantes se cayó, específicamente fueron 11 placas y 20 quedaron dañadas y no hubo un posterior peritaje. Afortunadamente ocurrió cuando todavía no habían comenzado las clases y por eso no hubo que lamentar una tragedia.

Además, dijeron que el edificio no cuenta con salidas de emergencia, los bebederos funcionan irregularmente debido a la baja presión del agua, la biblioteca tiene problemas de ventilación porque se colocaron ventanas que no se pueden abrir, hay rajaduras en el salón de usos múltiples y la instalación eléctrica es deficiente, haciendo que salten las térmicas.

Confían en llegar a un acuerdo para que se solucionen estos problemas y que el colegio pueda funcionar normalmente y brinde seguridad. Esperamos que así sea.

Rosa Caneda para www.info-almagro.com.ar (05/04/12)
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