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Discriminación en
colegio de Caballito

La discriminación existe desde que el mundo es mundo, simplemente porque todos somos diferentes y en esas diferencias, que todos vemos, aunque no las digamos, hoy se consideran un pensamiento discriminatorio.

En los programas de televisión, cada vez se usa más el verbo en potencial, por temor a que alguien pueda tomar a mal las cosas y haga un juicio; si alguien dice: gorda, me alcanzás una lapicera, el INADI lo interpreta como discriminación y así ocurre con diferentes cosas, que nos impiden actuar espontáneamente y con temor a lo que tenemos que decir.

Hace años, era común escuchar: voy al almacén del gallego, voy a la verdulería del tano y también un hola negrita, ¿cómo andás?. Ahora si alguien dice: compré las verduritas al boliviano de la esquina, se convierte en un escándalo!!! A mi no me molestaría que me digan: cómo te va argentina? pero, lo que sí me molesta es que hay otras actitudes que son realmente discriminatorias y nadie hace nada por cambiarlas.

En estos días leí en un periódico matutino que en el Colegio San José de Calasanz, en el barrio de Caballito, se le negó la inscripción a una niña, porque sus padres no están casados. "El rector nos dijo que nuestra situación era incompatible con lo que ellos enseñaban", aseguró el padre de la menor, quien realizó la correspondiente denuncia pública, en medios de comunicación.

El sacerdote adujo que el hecho de no estar unidos en matrimonio "era incompatible" con lo que la institución interpretaba bajo el concepto de "familia" y que, por ese motivo, la nena "no podía entrar al colegio".

"Tengo entendido que en otros lugares no hay problemas de este tipo con gente que no está casada. Subí mi caso a Twitter y me empezó a responder gente que no estaba casada y había podido entrar en otros colegios", comentó el padre de la niña, durante la entrevista.

Algunos medios intentaron comunicarse con la rectoría del Colegio Calasanz para ahondar en el tema y conocer su postura, pero solo respondieron que no iban a hacer declaraciones ni ningún tipo de descargo sobre lo expuesto. "El padre no atiende a los medios", se limitó a contestar un allegado al rector.

Es lamentable que en los tiempos que corren, cuando ya se acepta el matrimonio igualitario y se obtuvieron tantos logros importantes, todavía la iglesia tenga estas actitudes incomprensibles y discriminatorias con los chicos y también con los adultos, ya que además de este caso, todos sabemos que las parejas que se divorcian, luego no pueden comulgar, pero si pudieron hacerlo los militares de la dictadura que cometieron tantos genocidios.

Si para Dios somos todos iguales, ¿quien es el hombre para marcar las diferencias y acomodarlas según su conveniencia?. No estamos jugando a la "señorita de San Nicolás": con esta sí, con esta no, con la que más me gusta me quedo yo!!!

Es realmente un acto discriminatorio y de un colegio religioso, que debería predicar con el ejemplo.

Rosita Fashion - www.info-almagro.com.ar (2956) - Publicado el (03/07/14)